Industria farmacéutica
En la industria farmacéutica se aplican estrictas normativas para el diseño higiénico de los componentes del sistema. Además de la seguridad y la resistencia a la corrosión, las condiciones de funcionamiento requieren superficies de alta pureza para que pueda excluirse cualquier contaminación microbiológica.
Las líneas de proceso están altamente automatizadas, cambios frecuentes de producto y los medios con propiedades de productos difíciles están a la orden del día. Por esta razón, los componentes del equipo deben tener el mínimo posible de espacio muerto y ser fáciles y rápidos de limpiar o esterilizar (CIP/SIP) entre dos series de producción. Las propiedades de los medios individuales, como el agua purificada, los productos químicos para la limpieza de los sistemas CIP o WFI o el vapor ultrapuro para los sistemas SIP, determinan los requisitos de las válvulas utilizadas.
El acero al cromo-níquel-molibdeno (acero CrNiMo 316 L) es particularmente adecuado como material del cuerpo de las válvulas. La embutición profunda produce superficies compactas, de alta calidad y resistentes a la corrosión con baja rugosidad, que pueden ser templadas aún más, por ejemplo mediante electropulido. Los elastómeros están diseñados de acuerdo con la FDA y la USP Clase VI y pueden ser vaporizados hasta 180°C.
Ya sea para la producción de soluciones de inyección o infusión, para jarabes o gotas en la industria farmacéutica o para plantas de pasteurización flash, las válvulas industriales autoaccionadas de Mankenberg son una solución eficiente para los procesos exigentes de la industria farmacéutica.